La Familia

Obra de DIOS

El Libro del Genesis nos deja ver el Gran Amor de DIOS hacia la vida; cito el comienzo:

En el principio, cuando Dios creó los cielos y la tierra, todo era confusión y no había nada en la tierra. Las tinieblas cubrían los abismos mientras el espíritu de Dios aleteaba sobre la superficie de las aguas.

Curiosamente nos dice que: “El Espíritu de DIOS aleteaba sobre la superficie de las aguas”, sin decirlo, nos revela la Santísima Trinidad; un solo DIOS en tres personas distintas; Padre, Hijo y Espíritu Santo…. Tres personas distintas un solo DIOS. Y esto que parece obvio y simple en realidad es profundo y místico….

De esta manera podemos ver que en el origen de la creación el concepto “Familia” ya era de manera perfecta de modo que, al hacernos a imagen y semejanza se grabó en nuestro interior el gusto por “la vida en familia”.

Partiendo de este modelo de “Una Familia Bella y Unida” es como en el principio de la existencia del hombre, de forma natural el deseo y el empuje por conformar “La Familia” como compañía para crecer y compartir se da de manera natural.

Ciertamente no se cumple en todos los casos pues en la actualidad podemos ver que muchas familias se han deteriorado, lastimado y manchado debido a la mala convivencia, los malos tratos y las “lesiones” causadas por el dolor y las heridas del pasado, sin embargo, el plan original no se pierde ni se corrompe.

Es tan importante “La Familia” que por ello esta es atacada en todos los flancos y momentos; destruir nuestros lazos familiares es la pretensión del maligno, enemigo de DIOS y del hombre, pese a todo; en JESUS esta la Victoria y de la misma manera en como EL le venció en el desierto; así será vencido en nuestra vida si nos tomamos de la mano del SEÑOR.

La Familia ocupa el lugar principal en el plan de DIOS y EL quiere que este ambiente (familiar) sea de una buena relación llena de comprensión, confianza, paz, amor y de unidad.

Por eso el hombre deja a su padre y a su madre, y se une a su mujer, y los dos se funden en un solo ser… (Genesis 2:24)

JESUS creció con sus padres; José y María y EL les obedeció en todo….  (Evangélico de Lucas)


Todos debemos sentirnos responsables de “salvaguardar” a nuestra familia y cada uno de los que la integramos debemos de contribuir a crecerla y hacerla florecer para que los miembros que la conforman puedan plasmar los grandes talentos que DIOS les ha otorgado a cada persona que la integra.

DIOS nos ofrece ayudarnos en nuestra unión familiar, EL nos dice:

Graba en tu corazón los mandamientos que yo te entrego hoy, repíteselos a tus hijos, habla de ellos tanto en casa como cuando estés de viaje, cuando te acuestes y cuando te levantes. 

Deuteronomio 6:6-7

Con estas palabras DIOS nos deja ver que el nos ha dado dirección y decretos para que podamos hacer florecer nuestra familia. Por tanto, debemos enseñar a nuestros hijos con nuestro ejemplo y enseñanza las instrucciones que DIOS nos ha dado para tener una vida prospera y feliz.

La Santísima Trinidad

Siendo un solo DIOS en tres personas distintas perfectamente unidas nos muestran el modelo del agrado y motivo de la familia, de ahí la importancia del mandato que nos dio de unirnos y ser una carne para ser fecundos y reproducirnos, DIOS ama la familia, porque ella asemeja a la “fusión-unidad” de la Santísima Trinidad, razón por la que el maligno se empecina en atacarla tanto con el propósito de querer destruirla y romperla.

Ingredientes para la Alegría y la Paz en la Familia

En cada presentación iré integrando diversos ingredientes, que todos ellos en conjunto nos garantizan lograr una buena relación y una excelente unidad familiar….

El amor es paciente y muestra comprensión. El amor no tiene celos, no aparenta ni se infla… 

No actúa con bajeza ni busca su propio interés, no se deja llevar por la ira y olvida lo malo…

No se alegra de lo injusto, sino que se goza en la verdad… 

Perdura a pesar de todo, lo cree todo, lo espera todo y lo soporta todo…

1 Cor 13:4-7

JESUS nos ha dicho: “Lo que Dios ha unido, no lo separe el hombre”.

S.O.S. al Rescate de la Familia

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *