Hola Miguel:
Desde pequeña soñé con tener un esposo amoroso con el cual pudiera dialogar, donde no hubiese discusiones, groserías y hoy sé que con la ayuda de Dios lo he logrado pues tengo un esposo y una familia maravillosa, y bueno agradezco a Dios tantos sueños cumplidos, soñaba con una vida normal, porque entre mis compañeros de trabajo, hasta me decían “tú no eres normal” y cuando conocí La Unión encontré otro de mis sueños no buscados, porque no sabía que algo así existía, que podía cambiar y sanar. Ahora tengo más sueños por perseguir y mientras Dios lo permita seguiré tras de ellos.
¡Te agradezco Dios! porque Miguel Angel, es el mejor amigo que pude haber encontrado, ¡Gracias Miguel!
Macrina